Diarios de Motocicleta
La verdad es que me costó un poco decidirme a ver “Diarios de Motocicleta”. Pensé que podría tener matices propagandísticos, o apoyar tendencias revolucionarias radicales y pasadas de moda. No me llamaba la atención ver una película política que tratara de forzar puntos de vista, independientemente a que estuviera de acuerdo o no con los mismos.
Pero todas estas preconcepciones quedan olvidadas al terminar la proyección. Esta obra del brasilero Walter Salles no es un sermón político, ni pretende recrear la vida como guerrillero y líder comunista de Ernesto “El Che” Guevara. “Diarios de Motocicleta” es una historia de amistad y de amor por un continente de contrastes donde la vida es angosta para muchos de sus habitantes.
El filme nos permite acompañar a dos jóvenes amigos (Guevara y Alberto Granado) que se aventuran a realizar un estupendo y accidentado viaje, en una destartalada motocicleta apodada “La poderosa”, que comenzaría en Argentina y concluiría en la península guajira de Venezuela, pasando por Chile, Perú, y Colombia.
La película nos hace testigos del crecimiento personal de estos jóvenes que a través de este largo viaje, realizado en el año 1.952, se sensibilizan ante las realidades sociales de América Latina originando un cambio espiritual que será determinante en sus futuras decisiones de vida.
Gael García Bernal, con talento y una fuerte presencia cinematográfica, nos brinda a un joven Ernesto Guevara creíble y humano que se hace accesible a cualquier espectador. Pero la verdadera sensación, y sin dejar de reconocer el eficiente trabajo de Bernal, es el menos conocido Rodrigo de la Serna en el papel del vivaz, fiel, y extrovertido Alberto Granado. El actor se apodera de cada escena con carisma, desenfado, y absoluta naturalidad, regalándonos una caracterización que entretiene y conmueve al mismo tiempo. Una interpretación para recordar.
Además de una eficiente dirección, buen guión, excelentes actuaciones, y una sensibilidad social que no huele a panfleto, la película cuenta con una sobresaliente fotografía que capta la extraordinaria belleza suramericana.
“Diarios de Motocicleta” es una excelente muestra de buen cine latinoamericano. Una pieza altamente recomendable.
Ramiro Cardozo B.-