Caballo de Guerra (War Horse)
El nuevo filme del famoso Steven Spielberg es un relato épico, de corte familiar, que cuenta la historia de un particular caballo inglés llamado Joey que, al estallar la primera guerra mundial, es separado de su joven propietario Albert (Jeremy Irvine). Durante dos horas y media somos testigos del difícil recorrido de este valiente animal por sobrevivir los avatares del conflicto bélico y reencontrarse con su fiel amigo Albert.
Los elementos más fuertes de la obra siempre tienen que ver con el aspecto visual. Spielberg y el reconocido Director de Fotografía Janusz Kaminsky logran unas composiciones estéticas que son para quitarse el sombrero. Ejemplo de esto es una magistral secuencia en la que Joey corre asustado a través de un campo de batalla. También merecen menciones especiales la impecable Dirección Artística, y la estupenda banda sonora a cargo del maestro John Williams.
A nivel histriónico destacan las decentes interpretaciones del escocés Peter Mullan, la inglesa Emily Watson y el francés Niels Arestrup, todos en papeles secundarios.
En el lado negativo encontramos una pobre labor protagónica de Jeremy Irvine. El joven actor luce incapaz de imprimirle alguna característica trascendente al personaje de Albert lo que perjudica seriamente a “Caballo de Guerra”. Sin embargo, creo que el mayor problema de la obra es su inconsistencia narrativa y un guion que no permite que la historia alcance los niveles emotivos que promete.
Aunque no se pueden desconocer sus fuertes elementos estéticos y sónicos “Caballo de Guerra” solo consigue convertirse en un moderado entretenimiento, algo meloso y excesivo en su metraje, que pasa a ser un título menor dentro de la filmografía de su director.
Ramiro Cardozo B.-