Babel

Todo lo que hacemos puede tener repercusiones que trascienden fronteras y afectan drásticamente las vidas de individuos con los cuales no tenemos ninguna relación aparente. Esta es la premisa de “Babel”, un drama multicultural que enlaza cuatro historias que ocurren en distintos puntos del globo.

El filme, dirigido por Alejandro Gonzalez Iñarritu y escrito por Guillermo Arriaga, posee la estructura no lineal que la pareja de creadores ya ha utilizado en sus colaboraciones anteriores (Amores Perros, y 21 Gramos), pero en esta ocasión el rompecabezas es mas amplio por el hecho de estar aderezado por distintas culturas que comienzan a tener puntos de encuentro a raíz de un incidente en el que una turista norteamericana es herida de gravedad en Marruecos. Este infortunio, además de afectar la vida de los directamente involucrados, comienza a determinar situaciones que ocurren en sitios tan distantes como Japón, México, y Estados Unidos.

El filme, muy alabado por gran parte de la critica especializada, demuestra la habilidad de Gonzalez Iñarritu como director. El mexicano ensambla su pieza con sobrada destreza y permite que todas las historias que suceden en distintas zonas geográficas tengan la misma importancia y se relacionen de una manera que no se siente forzada.

Las actuaciones de los famosos Brad Pitt, Cate Blanchett, y Gael García Bernal, son eficientes, pero las verdaderas dueñas de la pantalla son la japonesa Rinku Kikuchi y la mexicana Adriana Barraza quienes realizan interpretaciones sencillamente brillantes.

Todo en esta película se encuentra muy bien ejecutado, pero debo confesar que aunque tal vez sea la mejor construcción de Gonzalez Iñarritu, no sentí que tuviera el impacto y la fortaleza visceral que el director logró en “Amores Perros”. Todo se desarrolla con excelencia cinematográfica pero, a pesar de relatar situaciones extremas y muy dramáticas, la carga emotiva de filme luce contenida, y su conclusión algo fría.

“Babel” es una muy buena película que merece ser vista por más de un motivo, aunque creo que es del tipo de obra que genera admiración pero no termina de emocionar por completo. Claro, esta es solo la opinion de un humilde espectador.

Ramiro Cardozo B.-