El Aviador (The Aviator)

Antes de ver “El Aviador” había leído algunas reseñas que se empeñaban en concluir que la cinta era una obra menor de Martin Scorsese, que no tenía el toque maestro de producciones como “El Toro Salvaje”, “Buenos Muchachos”, o “Taxi Driver”. Algunos analistas criticaban al director por haber perdido su osadía cinematográfica. Tal vez este tipo de críticas y algunas opiniones adversas de amigos cinéfilos mermaron mis deseos de ver la película en una sala de cine.

Después de haber visto la obra en formato dvd hace unos pocos días, todavía me siento sorprendido por la dureza de los argumentos mencionados en el párrafo anterior. Es cierto que “El Aviador” no es la mejor película de Scorsese pero eso no la convierte en una obra menor. En mi opinión, el veterano director ha realizado un muy buen filme que demuestra una vez más, y de forma contundente, su inagotable talento.

Este sólido relato cinematográfico nos permite conocer parte de la vida del magnate norteamericano Howard Hughes, hombre complejo, visionario de la aviación, director y productor de cine, playboy legendario, celebridad en la época dorada de Hollywood, y victima de un desorden mental importante que lo llevo a la auto reclusión. La película abarca un periodo de aproximadamente 20 años en la vida de este excéntrico personaje contando diversos aspectos de su historia personal de forma fluida y amena. Scorsese recrea con mano maestra una época fastuosa y algo excesiva sin glorificarla ni censurarla, logrando combinar equilibradamente los aspectos frívolos de la vida de Hughes con su trascendente visión evolutiva dentro del mundo de la aviación, y su tortuoso mundo interior.

Leonardo Di Caprio en el rol de Hughes realiza un gran trabajo. El actor luce maduro y en control absoluto de su personaje. En mi opinión es el mejor trabajo de su carrera hasta la fecha. Cate Blanchet brilla en el papel de la extravagante y vivaz Katharine Hepburn. Los siempre eficientes Alan Alda, John C. Reilly, Alec Baldwin, e Ian Holm realizan sólidos papeles complementarios. El único trabajo interpretativo que desentona de forma notable es el de Kate Beckinsale en el rol de Ava Gardner. En mi opinión la hermosa actriz se siente algo fingida y en algunas escenas parece más una caricatura que un personaje real (afortunadamente su papel no ocupa mucho tiempo en pantalla).

Excluyendo la errática interpretación de Beckinsale “El Aviador” es una obra redonda, dirigida con elegancia y esmero que, si bien no rompe paradigmas ni revoluciona el género de la épica biográfica, constituye un ejemplo de buen cine y merece ser destacada positivamente dentro de la filmografía del gran Martin Scorsese.


Ramiro Cardozo B.-